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COMISIÓN ESPECIAL DE DERECHOS HUMANOS, EQUIDAD Y GÉNERO

(Sesión celebrada el día 27 de agosto de 2020).

 

SEÑORA PRESIDENTA.- Habiendo número, está abierta la sesión.

(Son las 13:38).

Dese cuenta de los asuntos entrados.

(Se da de los siguientes).

«Correo del señor senador Jorge Gandini, adjuntando antecedentes de trabajo parlamentario en relación al Consejo Nacional Consultivo Honorario de los Derechos del Niño y Adolescente y Guía Legislativa para proyectos referidos a derechos de la infancia y la adolescencia, oportunamente editada por el Parlamento, PNUD y Unicef.

Copia de la nota de la organización Stop Abuso Uruguay, de fecha 27 de julio de 2020, presentada ante la Institución Nacional de Derechos Humanos y Defensoría del Pueblo».

–La Comisión Especial de Derechos Humanos, Equidad y Género da la bienvenida a los señores representantes Verónica Mato y Gabriel Gianoli para que nos informen del contenido del proyecto de ley y sobre cómo se mejoró el texto en la Cámara de Representantes.

SEÑOR GIANOLI.- Agradecemos a esta comisión por recibirnos y a la señora presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Representantes, ya que junto con su comisión elevamos al pleno este trabajo.

Este proyecto de ley surge –vamos a ser muy breves– de la inquietud de la juventud de nuestro espacio, que estaba preocupada por los datos que arrojaba el Sipiav con relación a la violencia en niños, niñas y adolescentes. En 2019 el sistema recibió 4700 casos y ellos se enfocaron, principalmente, en el abuso sexual infantil intrafamiliar basándose en que el 24 % de esos casos –1100– sucedían dentro del entorno de la familia. Es uno de los abusos más crueles, de aquellos que no tienen voz.

Los datos también arrojaban que el 50 % de esos niños no advertían que estaban siendo abusados. Todo esto se suma a la pandemia, en que niñas, niños y adolescentes habían perdido contacto con el club deportivo, con la escuela, con los ámbitos donde se podría detectar esa situación. A su vez, a través de la plataforma CREA, del Ceibal,           se habían denunciado y se habían detectado situaciones de abuso sexual infantil.

En tal sentido, se presentó este proyecto que, en el inicio, hablaba de una campaña de prevención y concientización a través de los medios digitales, las redes sociales y todo lo lúdico, a través del celular y las plataformas. Posteriormente consultamos a una ONG y nos habló de la construcción del «no» en el niño, de marcar los límites, y así fue que lo elevamos para que la Comisión de Derechos Humanos de Diputados lo aprobara.

En realidad, no quisimos tirarlo como una noticia al aire, sino que buscamos el consenso. Fue así que  nos reunimos con la diputada Lustemberg, que conoce muchísimo el tema; con la diputada Roselló, del Partido Colorado; con la diputada Pérez Bonavita, de Cabildo Abierto, y con César Vega del PERI, así como con los compañeros del Partido Nacional, los diputados Amarilla y Viviano. En definitiva, nos reunimos con todos los diputados que integraban la comisión de salud y la de población y desarrollo, para conocer de primera mano cuál era su opinión.

Obviamente, entendíamos necesario que el INAU nos diera su opinión sobre este proyecto y fue así que visitamos al doctor Pablo Abdala, que  por su doble condición, es decir como exlegislador de fuste y como nuevo presidente del organismo, nos podía dar una mano en lo que tiene que ver con la técnica legislativa y con la realidad del INAU. Nos dimos cuenta de que no alcanza con las herramientas que había, porque la Línea Azul, el 0800,  no era suficiente. También teníamos un tema de horarios, porque había 12 horas para hacer las denuncias.

Entonces, esto fue una innovación que luego pudimos plasmar cuando la diputada Mato, como presidenta de la Comisión de Derechos Humanos, nos recibió primero a nosotros y luego, por suerte, al directorio del INAU ya constituido. Allí la directora Argenzio, el director Velázquez y el presidente Abdala nos sugirieron que  –más allá de que nosotros estábamos enfocados en el abuso sexual infantil– esto fuera una campaña nacional de prevención del maltrato en general en niños, niñas y adolescentes.

A eso se sumaron los planteos a los que luego se referirá la diputada Mato sobre la elaboración de un trabajo que manejara el Sipiav, que nosotros entendíamos que era muy importante y que tenía que ser permanente. Ellos aportaron datos que muestran que en los meses de enero y febrero, en los que no hay escuela ni actividad deportiva curricular, aumentaban los casos.

Fue así que, a instancias de la diputada Mato, se habló de quitar lo que decía al principio el proyecto respecto a que fuera durante la pandemia y establecer que fuera una campaña permanente. Quedó en manos del Sipiav –que, como ustedes saben, compone a todos los actores del Estado– ir sobre los contenidos y sobre la campaña estratégica que ya traía el INAU y que se incorporaba a esto.

                Por otra parte, quiero decir que nosotros traemos un planteo relativo a una corrección que nos parecía necesario hacer en virtud de que está a estudio la ley de medios. El artículo 6.º del proyecto que estamos proponiendo dice: «El Sistema Integral de Protección a la Infancia y a la Adolescencia contra la Violencia establecerá los contenidos, la periodicidad y los actores y demás condiciones de la Campaña Nacional, de acuerdo a lo preceptuado por el literal B) del artículo 7º de la Ley Nº 19.747…». Como la ley de medios que está a estudio va a incorporar algunas cuestiones a la ley actual, estamos planteando que luego de «Campaña Nacional» se exprese: «de acuerdo a la legislación vigente». Esta modificación nos permitiría allanar ese tema, porque también era una preocupación de los legisladores ver cómo se podían conectar estas campañas con la nueva ley de medios.

                Finalmente, agradezco la oportunidad que me han dado y , por supuesto, que se le dé celeridad a un tema que vemos que sucede  todos los días, que debemos atender y que, como bien dijeron muchas autoridades, es mucho más profundo, ya que tiene que ver con las conductas que tienen aquellos que atentan contra nuestros niños, niñas y adolescentes. Es una herramienta más que nos va a permitir intentar frenar este flagelo y, de una vez por todas, algún día, terminar con él.

                Muchas gracias, señora presidenta.

SEÑORA MATO.- Agradezco la invitación y la posibilidad de estar acá, en la Comisión Especial de Derechos Humanos, Equidad y Género de la Cámara de Senadores.

                Cuando recibimos este proyecto de ley entendimos que debíamos darle la celeridad que correspondía, por la temática y, justamente, por el contexto en el cual estábamos. Lo recibimos el 3 de junio, y como en ese momento la Cámara de Representantes estaba estudiando la LUC, no se pudo trabajar en la comisión respectiva ya que dos de sus cuatro integrantes estábamos en la asesora abocada al estudio de la LUC. Ni bien finalizó esa labor, nos abocamos –ya teníamos la agenda– a darle prioridad y celeridad al tratamiento de este proyecto de ley.

Primeramente invitamos a los representantes –ni que hablar–, pero nos interesaba recibir a los jóvenes que habían elaborado esta propuesta, que fueron los primeros en acercarse a comentarnos esto. El hecho de recibir proyectos de los jóvenes, que piensen sobre distintas situaciones y quieran darles una solución, nos parecía importante y, en ese sentido, quisimos darle celeridad. La palabra de los jóvenes con respecto a situaciones que suceden en el país y las formas de solucionarlas desde el punto de vista legislativo también nos parecen aspectos importantes y destacables de este proyecto de ley. Además –como bien dijo el señor diputado Gianoli–, tiene el apoyo y el consenso de todos –o de casi todos; si faltó alguno fue porque no pudo firmar– los partidos políticos.

Nosotros conocimos este proyecto de ley a través de la señora diputada Lustemberg –quien lo había presentado y había conversado sobre él en la bancada del Frente Amplio– y, cuando llegó, decidimos darle la celeridad correspondiente. Para ello, invitamos a los representantes, a los jóvenes y a las autoridades del INAU y del Sipiav, lo que nos permitió ahondar en esta realidad.

Les recomiendo –disculpen el atrevimiento– que, si no lo han hecho, vean los materiales del Sipiav, tanto el informe de gestión 2019 como los distintos materiales que tienen, pues ayudan a entender la realidad tan tremenda que están atravesando niñas, niños y adolescentes en Uruguay. Y esa realidad no es de ahora –no es algo que sucede desde hace diez, veinte o treinta años–, sino que se ha hecho visible hoy en día por el desarrollo de la legislación, de los derechos, y por haber sido reconocidos como sujetos de derecho los niños, niñas y adolescentes.

Si los señores senadores miran los datos, las gráficas –que son bastante terribles–, podrán ver que, lamentablemente, todas esas situaciones se dan en el seno familiar y que la mayoría de los abusadores son los padres de las víctimas, los padres varones. Como dije, se dan en el contexto familiar, y el 91 % de los abusadores también son varones. Entonces, esto nos arroja una cantidad de datos que hablan de la importancia de esta campaña, sobre todo actualmente porque, como bien decía el diputado Gianoli, el confinamiento ha hecho que estos jóvenes y niños abusados –el mayor rango se da en niños con edades de entre 9 y 12 años pero también hay casos de abuso en niños de 0 a 3 años por lo que se produce en todas las edades– no puedan salir de sus hogares y que no tengan otros lugares donde poder contar lo que les sucede. El confinamiento hace que tengan que estar todo el tiempo con su familia, encarcelados con sus propios abusadores. Es una situación muy terrible que, obviamente, esta campaña no soluciona y hay que seguir trabajando, pero consideramos que es buena como un aporte a una solución rápida del tema. Estuvimos hablando con la dirección del Inau y se nos dijo que luego, con la reglamentación, habrá diversas formas de llegar a estos niños en los distintos espacios donde se encuentren como, por ejemplo, cines y teatros o por medio de las redes sociales y plataformas educativas. A su vez, en la reglamentación habrá que ver si se segmenta en relación con los abusadores y cuál sería la forma de hacerlo.

                Por otra parte, entendimos acertada la propuesta de las autoridades del INAU en cuanto a que el proyecto tenga una evaluación luego de un año, que eso se establezca en la reglamentación y que esa evaluación se presente al Poder Legislativo. Nos referimos a cómo fue el funcionamiento del proyecto y su trazabilidad para estar atentos a si fue algo bueno o si se necesita hacer algo más a esos efectos. En definitiva, si bien el mismo día de la comparecencia hicimos algunos cambios –todos en concordancia con lo que se había planteado–, dimos el visto bueno al proyecto, que fue aprobado por la unanimidad de los miembros de la comisión y luego por el plenario.

                Con respecto a lo que decía Gianoli sobre el cambio en el artículo 6.°, ustedes tienen más conocimiento desde el punto de vista de la técnica legislativa en el sentido de si corresponde o no. Creo que si se puso esta ley y se colocó este artículo, significa que la ley está cumpliendo con esto y es importante también preservarlo. No sabemos qué tendrá la normativa vigente en el sentido de si cuenta con campañas de bien público y, en ese sentido, mi opinión –si me permiten el atrevimiento– es que, más allá de esta campaña y de este proyecto de ley que me parece muy loable, ni que hablar que desde lo parlamentario tenemos que seguir trabajando en esto.

SEÑORA SANGUINETTI.- Agradecemos su visita y la presentación que han hecho.

                Sin duda, este es un tema muy importante. Hace un tiempo estuve analizando los datos del Sipiav y la verdad es que las cifras interpelan. Quizás, ya que estuvieron trabajando en esto podrían informarnos si existe alguna medición comparativa de Uruguay con otros países en relación con la pandemia. Planteo esta curiosidad porque todos estamos atravesados por la misma situación y aunque Uruguay haya liberado antes, me interesaba saber si tenían algún dato en ese sentido.

SEÑORA MATO.- No tenemos esa información.

SEÑORA PRESIDENTA.- La duda que me surge es si habría dos campañas, una hacia adultos y otra hacia niños, porque pienso que la campaña sobre el tema del maltrato en general estaría dirigida hacia los adultos y el proyecto que apunta a detectar el abuso a través de las plataformas del Ceibal sería dirigido específicamente a los niños. Parecen ser dos cosas paralelas. No sé si eso lo tuvieron en cuenta.

SEÑOR GIANOLI.- El proyecto fue cambiando, y las autoridades del INAU traían una estrategia nacional contra el abuso infantil en todos los órdenes. Podemos ver datos de todo tipo, de todo color, que es verdad que nos interpelan y nos preocupan, pero también debíamos pedirle al organismo competente que nos diera las directivas de por dónde ir. Y el vicepresidente Velázquez hablaba de contenidos focalizados a cada tipo de abuso, incluyendo también el mensaje hacia los adultos, porque había una medición que demostraba que cuando se insistía con el tema había un repliegue del abusador, por más que siempre encontraba mecanismos para lograr su objetivo. No hay una medición internacional, pero sí hay una medición que hace el INAU mes a mes, que fue la que nos sorprendió, porque los últimos datos de enero y febrero demostraban un crecimiento. Ese crecimiento –nobleza obliga, y así lo reconocía la directora Argenzio– no significa que haya más casos, sino que lo que ocurre es que se detectan más los casos. Entonces, hay que profundizar y aumentar los controles y hay que ir sobre las zonas de fronteras y la ruralidad, donde –la versión taquigráfica lo deja claro– el Estado está ausente. De manera que hay que fortalecer esos lugares, incluidas las áreas de industrialización y las nuevas situaciones que vienen.

                En definitiva, los distintos contenidos irán a diversos temas, pero eso ya es competencia de los técnicos, porque, en definitiva, son ellos quienes deben asesorar.

SEÑORA MATO.- En realidad, nosotros planteamos el tema de los contenidos para los niños, niñas y adolescentes y también los adultos. Y en ese sentido se entendió –por las características que tiene el Sipiav y por cómo está constituido– que esa segmentación correspondía más a los técnicos en comunicación y a quienes intervengan en la reglamentación de la propia ley que a nosotros como legisladores.

                Pero, sin duda, hay que tener en cuenta también lo que decía el señor diputado Gianoli. Pensemos en el impacto que va a tener la construcción de UPM 2, que va a ser un foco en el que va a haber muchas personas trabajando en una determinada zona. Esto está dentro del proyecto, pero también el Estado tiene que estar atento a la trata de personas, el abuso que se puede llegar a generar con el impacto territorial que implica tantas personas trabajando y manejando sumas de dinero importantes.

SEÑOR GANDINI.- Creo que el proyecto viene a complementar una serie de medidas y a ir llenando un vacío en un tema que cada vez está más presente en la sociedad. Toda herramienta que ayude en ese sentido debemos acompañarla, y me parece que esta es una muy buena solución.

                En la Cámara de Representantes este proyecto se estudió a fondo; se aprobó por unanimidad; se consultó; compareció el INAU, que es el organismo de referencia. De manera que me parece que no admite demasiada discusión y deberíamos acompañarlo.

                Con respecto a la modificación que se plantea, creo que es innecesaria. La ley de medios no va a hacer ese cambio, porque lo que establece el artículo 7.º en su literal B) de esa ley, que es la que crea el Sipiav, es la estructura de ese sistema. En el literal A) dice cuál es la estructura nacional y en el literal B) dice cuál es la estructura local y cómo se integra el comité. Lo que dice este proyecto de ley es que se utilizará también esa estructura local para comunicar. Eso no lo va a cambiar la ley de medios. No me parece que, por hacer esa modificación, el proyecto de ley tenga que volver a la Cámara de Representantes y demorarse un poco más. Creo que nosotros deberíamos procesar hoy mismo la decisión sobre este proyecto de ley y enviarlo al plenario para darle aprobación en las sesiones de setiembre.

                Lo planteo rápidamente porque sabemos que nos vamos para Aguas Corrientes en unos minutos con la señora senadora Sanguinetti.

SEÑOR DOMENECH.- Quisiera saber si se dimensionó el costo de la campaña y los fondos con los que se va a cubrir, porque eso es importante también, me parece.

SEÑOR GIANOLI.- El proyecto inicial hablaba de que iría a las partidas presupuestales del INAU, pero el propio INAU nos pidió que eso se eliminara porque está la cooperación internacional, que puede ayudar, y ellos podían incorporar dentro de su estrategia esta temática en profundidad, focalizada.

SEÑORA MATO.- El INAU tiene una línea de apoyo con Unicef. Entonces, si nosotros incluíamos esa norma, le cerrábamos esa posibilidad, en vez de dejar abierta esa puerta al Estado para que le resulte más sencillo poder financiar esta campaña.

SEÑORA PRESIDENTA.- Agradecemos a la señora diputada Mato y al señor diputado Gianoli por su presencia en la comisión.

                Se trata de un proyecto de ley muy importante, porque realmente estamos ante un flagelo tremendo. En ese sentido, todo lo que se pueda hacer para tratar de que la situación mejore va a ser bienvenido. Entonces, gracias por el trabajo de ustedes también.

SEÑOR GIANOLI.- Muchísimas gracias. Es un honor estar aquí.

 

(Se retiran de sala la señora diputada Verónica Mato

y el señor diputado Gabriel Gianoli).

 

(Se suspende momentáneamente la toma de la versión taquigráfica).

 

SEÑOR GANDINI.- Propongo volver a reunirnos el martes, luego de finalizada la sesión del plenario.

SEÑORA PRESIDENTA.- Si la comisión está de acuerdo, así se procederá.

                No habiendo más asuntos, se levanta la sesión.

(Son las 14:06).

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Montevideo, Uruguay. Poder Legislativo.